Bienvenidos a compartir en el Espíritu de Dios

Hola a todos los que visitáis este blog. ¡Gracias por entrar! ¡DIOS OS BENDIGA!
En este momento empezamos a compartir nuestras vivencias y, también nuestras oraciones.
Rezo por vosotros. Rezad, también por mí. ¡GRACIAS!

¡Jesús es amor sin límites!



¡Dios te ama!¡Él esta vivo en tu corazón!

¡Que Dios os bendiga cada día de este año 2024


MªEsperanza Román


¡Alabado sea Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo!
Sólo Jesucristo es el camino, la verdad y la vida. ¡SÓLO JESÚS SALVA! Léelo en la Biblia.


¡Te basta mi gracia!

Reza ante el Santísimo por tu familia, amigos y enemigos...¡Él es el Todopoderoso!



¡Oh Señor, pongo en tus manos la sangre derramada por todos aquellos niños muertos en el vientre de sus madres a manos de los hombres, únela a la sangre de tu hijo Jesús que derramó por todos nosotros para la remisión de todos los pecados del mundo! Acoge, Señor esta oración. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén
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domingo, 19 de mayo de 2013

Pentecostés

Envío número: 554 - 18 de mayo de 2013  
 
Visiones de María Valtorta sobre el día de Pentecostés

Palabras que nos ayudan a comprender el sitial de María en la Iglesia
La obra de María Valtorta es pródiga en visiones y revelaciones que nos emocionan hasta las lágrimas. Lo que ocurrió en aquel hermoso día de Pentecostés fue relatado por ella, de tal modo que podamos comprender el rol de María en la historia de la salvación, ya que Ella es la más maravillosa corona de la Creación de Dios. La Santisima Trinidad canta de alegría al admirar la perfección en el amor de Su hija predilecta.
 
Los invitamos a disfrutar hoy estas hermosas visiones de María Valtorta:
 
 
Fragmentos del escrito de Maria Valtorta sobre Pentecostés:
 
...Un ruido fortísimo y armónico, con sonido de viento y arpa, con sonido de canto humano y de voz de un órgano perfecto, resuena de improviso en el silencio de la mañana. Se acerca, cada vez más armónico y fuerte, y llena con sus vibraciones la Tierra, las propaga a la casa y las imprime en ésta, en las paredes, en los muebles, en los objetos. La llama de la lámpara, hasta ahora inmóvil en la paz de la habitación cerrada, vibra como chocada por el viento, y las delgadas cadenas de la lámpara tintinean vibrando con la onda de sobrenatural sonido que las choca.

Los apóstoles alzan, asustados, la cabeza; y, como ese fragor hermosísimo, que contiene las más hermosas notas de los Cielos y la Tierra salidas de la mano de Dios, se acerca cada vez más, algunos se levantan, preparados para huir; otros se acurrucan en el suelo cubriéndose la cabeza con las manos y el manto, o dándose golpes de pecho pidiendo perdón al Señor; otros, demasiado asustados como para conservar ese comedimiento que siempre tienen respecto a la Purísima, se arriman a María.

El único que no se asusta es Juan, y es porque ve la paz luminosa de alegría que se acentúa en el rostro de María, la cual alza la cabeza y sonríe frente a algo que sólo Ella conoce y luego se arrodilla abriendo los brazos, y las dos alas azules de su manto así abierto se extienden sobre Pedro y Juan, que, como Ella, se han arrodillado. Pero, todo lo que he tardado minutos en describir se ha verificado en menos de un minuto.

Y luego entra la Luz, el Fuego, el Espíritu Santo, con un último fragor melódico, en forma de globo lucentísimo, ardentísimo...
 
 
   
¡Ven Espíritu Santo, Ven!

domingo, 27 de mayo de 2012


RECETA PARA UNA NUEVA EFUSIÓN DEL ESPÍRITU ESTE PENTECOSTÉS



Si al venir te encuentra humilde, sin inquietud, lleno de temor ante la
Palabra divina, se posará sobre ti y te revelará lo que Dios esconde a los
sabios y entendidos de este mundo.
Guillermo de Saint-Thierry. Abad cistercense en Saint-Thierry (Francia) (1085-1148)

Así como un tronco seco que recibe agua germina, del mismo modo el alma
pecadora que, por la penitencia, se hace digna del Espíritu Santo produce
frutos de santidad.
San Cirilo de Jerusalén. Obispo y doctor de la Iglesia (315-386)

Si quieres que en tu espíritu nazca la devoción y que crezca el amor de Dios y apetito de las cosas divinas, limpia el alma de todo apetito y asentimiento y pretensión, de manera que no se te dé nada por nada.
San Juan de la Cruz. Carmelita y doctor de la Iglesia (1542?-1591)

Permanece por la fe en el Cuerpo de Cristo y un día serás un solo espíritu con El. Ya por la fe estás unido a su Cuerpo; por la visión estarás también unido a su Espíritu.
Guigo, el Cartujano. Prior de la Gran Cartuja (1083-1136)

“El que tenga sed, que venga a mí; el que cree en mí, que beba. Como dice
la Escritura: de sus entrañas manarán torrentes de agua viva”. Decía esto
refiriéndose al Espíritu que habían de recibir los que creyeran en él.
Jn 7,37-39