Porque no se ha imitado la actitud
del Santo Padre respecto a recibir y
distribuir la Sagrada Eucaristía?
Benedicto XVI, desde la Festividad del "Corpus Christi" del año 2008, invitó de una manera ejemplar, sin mediar palabra, a recibir a Cristo, "de rodillas y en la boca", y de esta manera, y no de otra.
Fué un gran mensaje al mundo, que el mundo no percibió? o no quiso ver..., fue una invitación sutil, a imitarlo de alguien con autoridad suficiente como el Vicario de Cristo, pero, ¿quien estaba dispuesto a seguirle, sin ser tachado de retrógado? cuando esta forma equivocada de distribución de la Eucaristía en la mano y de pié, ya se había desbordado..., y ya se había extendido por todo el mundo, no había otra manera más elegante de darlo a entender como la lección que dio Benedicto XVI, ante esta norma ya generalizada, que más bien trivializaba lo sagrado, recibir a Jesús en la mano....., perdiéndo así cada vez más, el sentido Divino del Sacramento.
Por otro lado y a todo tren se estaba distribuyendo la Santa Comunión por manos de laicos, no tenían las manos consagradas, pero, esto se hizo ver, como que carecía de importancia, haciendo sufrir a Jesús, El cual en tantos mensajes nos repetía y sigue repitiendo, que ésta actitud con la Eucaristía, que es: "Su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad", le desagrada profundamente y le hace sufrir.
¿Porque entonces esta actitud permisiva en sacerdotes, Obispos, Cardenales? a los cuales sí, se les dio la potestad de consagrar, y que además de poder consagrar el Cuerpo de Cristo en la Santa Misa, también tienen las manos consagradas para distribuir tan Grande y Divino Sacramento, como es la Santa Eucaristía, como los primeros apóstoles a los que Jesús, nombró Obispos.
¿Porqué no se ha hecho? "Qui lo sa".
Es posible que no creamos en los mensajes del Cielo, es posible que creamos que Dios solo hablaba antes, a los hombres... ¿es posible, que realmente pensemos que Dios tenga menos poder ahora, para hacer y decir lo que le plazca? ¿es posible que Dios nos deje de lado, allá cada cuál con su libre albedrio? o, es posible que Dios se ocupe de sus hijos como Padre Amantísimo, ahora y siempre, es posible, que no seamos, más bien nosotros los que no le escuchemos ahora que nos hemos vuelto autosuficientes y poderosos con tantos medios a nuestro alcance, es posible que sea esta la diferencia?
¿Es posible que costara tanto intentar agradar a Dios, poniendo un reclinatorio para comulgar, distribuyendo otra vez la comunión en la boca y de rodillas?
El pueblo de Dios, lo hubiera aceptado, sincera y llanamente y las gracias del Cielo hubieran sido inmensas, pues, se ha dado el caso aislado de algunos sacerdotes, que sí, lo han hecho y ha sido muy bien acogido, es más en aquella iglesia han acudido un gran número de fieles, cada vez mayor, ávidos, de darle otra vez el sentido sagrado, a tan augusto Sacramento.
Se sabe que Nuestra Santísima Madre, la Virgen María, en al última Cena, en la cuál estuvo presente pero, en otra estancia como era habitual en aquella época en la mujeres, Ella, la llena de gracia, la que había llevado a Su Hijo en sus entrañas, Ella, la que lo había, amamantado y criado, Ella la Madre de Dios, la Reina del Cielo , Ella, en la última Cena, recibió a su Divino Hijo, de rodillas y en la boca.
¿Entonces porqué, se deja la distribución de la comunión, a cualquier laico o laica instruido o no? este no es el requisito.
Para distribuir la comunión, el primer requisito que nos pide Cristo, es el de tener las manos consagradas, no quitarle el sentido Divino al Sacramento, si no, ¿es posible que vayamos a escuchar antes la propuesta masónica, que al mismo Cristo?
Quizás iremos comprendiendo que si no se obedece a un Papa, dificilmente podrá gobernar la Iglesia.
A un pueblo que no obedece, toda capacidad de gobernarlo se vuelve nula.
¡Podemos intentarlo ahora...nunca es tarde!
Comunión en la mano, no, gracias.Demostremosle a Benedicto XVI, que sus esfuerzos no ha sido inutiles y que el Pueblo de Dios, lo ama.
Recibamos la Comunión en la boca y de rodillas (aunque no haya reclinatorio)
Propongo esta campaña de adhesión al Papa
Propongo esta campaña de adhesión al Papa
Gracias Benedicto, por su humildad, inteligencia, sencillez, sensibilidad, brillantez, elegancia, por su entrega y por su gran lección.
