“Queridos Hijos, cuando vienen a mí, como a una madre, con un corazón puro y abierto, sepan que los escucho, los aliento, los consuelo y, sobre todo, intercedo por ustedes ante mi Hijo. Sé que desean tener una fe fuerte y manifestarla de la manera correcta. Lo que mi Hijo les pide es una fe sincera, fuerte y profunda; en consecuencia, de cualquier manera que la manifiesten es válida. La fe es un secreto maravilloso que se guarda en el corazón. Ella se halla entre el Padre Celestial y todos sus hijos, se reconoce por los frutos y por el amor que se tiene hacia todas las criaturas de Dios. Apóstoles de mi amor, hijos míos, confíen en mi Hijo. Ayuden a todos mis hijos a que conozcan Su amor. Ustedes son mi esperanza, ustedes que intentan amar sinceramente a mi Hijo. En el nombre del amor, por la salvación de ustedes, según la voluntad del Padre Celestial y por mi Hijo, estoy aquí entre ustedes. Apóstoles de mi amor, que sus corazones, con la oración y el sacrificio, sean iluminados por el amor y la luz de mi Hijo. Que esa luz y ese amor iluminen a todos los que encuentran, y los haga regresar a Mi Hijo. Yo estoy con ustedes. De manera especial, estoy con sus pastores. Los ilumino y los animo con mi amor maternal para que, con sus manos bendecidas por mi Hijo, bendigan al mundo entero. ¡Les doy las gracias!”
Bienvenidos a compartir en el Espíritu de Dios
Hola a todos los que visitáis este blog. ¡Gracias por entrar! ¡DIOS OS BENDIGA!
En este momento empezamos a compartir nuestras vivencias y, también nuestras oraciones.
Rezo por vosotros. Rezad, también por mí. ¡GRACIAS!
¡Oh Señor, pongo en tus manos la sangre derramada por todos aquellos niños muertos en el vientre de sus madres a manos de los hombres, únela a la sangre de tu hijo Jesús que derramó por todos nosotros para la remisión de todos los pecados del mundo! Acoge, Señor esta oración. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén
En este momento empezamos a compartir nuestras vivencias y, también nuestras oraciones.
Rezo por vosotros. Rezad, también por mí. ¡GRACIAS!
¡Jesús es amor sin límites!
¡Dios te ama!¡Él esta vivo en tu corazón!
¡Que Dios os bendiga cada día de este año 2024
MªEsperanza Román
¡Alabado sea Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo!
Sólo Jesucristo es el camino, la verdad y la vida. ¡SÓLO JESÚS SALVA! Léelo en la Biblia.
¡Te basta mi gracia!
Reza ante el Santísimo por tu familia, amigos y enemigos...¡Él es el Todopoderoso!
¡Oh Señor, pongo en tus manos la sangre derramada por todos aquellos niños muertos en el vientre de sus madres a manos de los hombres, únela a la sangre de tu hijo Jesús que derramó por todos nosotros para la remisión de todos los pecados del mundo! Acoge, Señor esta oración. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén
Páginas
- Página principal
- Noticias
- Mensajes a Marga (La Verdadera Devoción al Corazón de Jesús)
- Adoración Perpetua
- Imágenes de Medjugorje
- Mensajes de Medjugorje
- DESPERTAD
- Medjugorje
- Oraciones
- Mis experiencias
- Testimonios
- Audios
- Canciones
- Imágenes
- El Santo Rosario
- Jesús de la misericordia
- Revelaciones Marianas
- Oraciones en latín
- Oraciones
- Rosario por España
- Cruzadas de Santa María
domingo, 2 de diciembre de 2018
Mensaje de Medjugorje 2 de diciembre de 2018
“Queridos Hijos, cuando vienen a mí, como a una madre, con un corazón puro y abierto, sepan que los escucho, los aliento, los consuelo y, sobre todo, intercedo por ustedes ante mi Hijo. Sé que desean tener una fe fuerte y manifestarla de la manera correcta. Lo que mi Hijo les pide es una fe sincera, fuerte y profunda; en consecuencia, de cualquier manera que la manifiesten es válida. La fe es un secreto maravilloso que se guarda en el corazón. Ella se halla entre el Padre Celestial y todos sus hijos, se reconoce por los frutos y por el amor que se tiene hacia todas las criaturas de Dios. Apóstoles de mi amor, hijos míos, confíen en mi Hijo. Ayuden a todos mis hijos a que conozcan Su amor. Ustedes son mi esperanza, ustedes que intentan amar sinceramente a mi Hijo. En el nombre del amor, por la salvación de ustedes, según la voluntad del Padre Celestial y por mi Hijo, estoy aquí entre ustedes. Apóstoles de mi amor, que sus corazones, con la oración y el sacrificio, sean iluminados por el amor y la luz de mi Hijo. Que esa luz y ese amor iluminen a todos los que encuentran, y los haga regresar a Mi Hijo. Yo estoy con ustedes. De manera especial, estoy con sus pastores. Los ilumino y los animo con mi amor maternal para que, con sus manos bendecidas por mi Hijo, bendigan al mundo entero. ¡Les doy las gracias!”
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario