SAN JUAN DE LA CRUZ, doctor de la Iglesia. Nació en Fontiveros, provincia de Avila (España), hacia el año 1542 en el seno de una familia humilde. En su juventud sirvió a los enfermos en el hospital de Medina del Campo a la vez que estudiaba en el colegio de los jesuitas. En 1563 ingresó en la Orden del Carmen. Completó su formación en la Universidad de Salamanca y, ya sacerdote, se sintió atraído por los cartujos, pero, tras un encuentro casual con santa Teresa de Jesús, fue el primero de los frailes carmelitas que a partir de 1568 se declaró a favor de su reforma, por la que soportó innumerables sufrimientos y trabajos. Fue apóstol, a la vez que contemplativo, en particular de la pasión de Cristo, y escritor. Sus poesías son una cumbre literaria, y es un clásico de la mística. Como atestiguan sus escritos, ascendió a través de la noche oscura del alma al monte Carmelo, monte de Dios, buscando una vida escondida en Cristo y dejándose quemar por la llama viva del amor de Dios. Murió en Úbeda (Jaén) el 14 de diciembre de 1591.- Oración: Dios, Padre nuestro, que hiciste a tu presbítero san Juan de la Cruz modelo perfecto de negación de sí mismo y de amor a la cruz, ayúdanos a imitar su vida en la tierra para llegar a gozar de tu gloria en el cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
SAN NIMATULLAH KASSAB AL-HARDINI (en el bautismo, José). Nació en Hardin, al norte del Líbano, en 1808, de una familia maronita con seis hijos, cuatro de los cuales siguieron la vida monástica o sacerdotal. A los veinte años ingresó en la Orden Libanesa Maronita. Ordenado sacerdote, fue nombrado director del estudiantado y profesor, labor que desempeñó hasta sus últimos años. Llevó una vida contemplativa, centrada en la Eucaristía, que armonizó con su dedicación a los hermanos y a la cultura. Fundó una escuela para instruir gratuitamente a la juventud. Le tocó vivir dos guerras civiles. Era severo y duro consigo mismo, pero misericordioso e indulgente con sus hermanos. Fue grande su devoción a la Virgen María, que trató de inculcar en los fieles. En 1845 la Santa Sede lo nombró asistente general de su Orden, pero continuó dando clases y ejerciendo su trabajo de encuadernador. Entre sus alumnos tuvo a san Charbel. Falleció en Kfifan el 14 de diciembre de 1858. Lo canonizó Juan Pablo II el año 2004.
No hay comentarios:
Publicar un comentario