Bienvenidos a compartir en el Espíritu de Dios
Hola a todos los que visitáis este blog. ¡Gracias por entrar! ¡DIOS OS BENDIGA!
En este momento empezamos a compartir nuestras vivencias y, también nuestras oraciones.
Rezo por vosotros. Rezad, también por mí. ¡GRACIAS!
¡Oh Señor, pongo en tus manos la sangre derramada por todos aquellos niños muertos en el vientre de sus madres a manos de los hombres, únela a la sangre de tu hijo Jesús que derramó por todos nosotros para la remisión de todos los pecados del mundo! Acoge, Señor esta oración. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén
En este momento empezamos a compartir nuestras vivencias y, también nuestras oraciones.
Rezo por vosotros. Rezad, también por mí. ¡GRACIAS!
¡Jesús es amor sin límites!
¡Dios te ama!¡Él esta vivo en tu corazón!
¡Que Dios os bendiga cada día de este año 2024
MªEsperanza Román
¡Alabado sea Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo!
Sólo Jesucristo es el camino, la verdad y la vida. ¡SÓLO JESÚS SALVA! Léelo en la Biblia.
¡Te basta mi gracia!
Reza ante el Santísimo por tu familia, amigos y enemigos...¡Él es el Todopoderoso!
¡Oh Señor, pongo en tus manos la sangre derramada por todos aquellos niños muertos en el vientre de sus madres a manos de los hombres, únela a la sangre de tu hijo Jesús que derramó por todos nosotros para la remisión de todos los pecados del mundo! Acoge, Señor esta oración. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén
Páginas
- Página principal
- Noticias
- Mensajes a Marga (La Verdadera Devoción al Corazón de Jesús)
- Adoración Perpetua
- Imágenes de Medjugorje
- Mensajes de Medjugorje
- DESPERTAD
- Medjugorje
- Oraciones
- Mis experiencias
- Testimonios
- Audios
- Canciones
- Imágenes
- El Santo Rosario
- Jesús de la misericordia
- Revelaciones Marianas
- Oraciones en latín
- Oraciones
- Rosario por España
- Cruzadas de Santa María
lunes, 1 de febrero de 2016
ID CON PRUDENCIA, SERENOS
by pajares95
284 29/11/13 Del E. Santo. ID CON PRUDENCIA, SERENOS
Publicado el 30 de noviembre de 2013 por unahoraconmigo
0
Queridos hijos: Es tanto lo que deseo, junto con Mi dulce Esposa, la Inmaculada Virgen María, vuestra Madre, reconoceros como hijos de Dios, no naturales, mucho menos consustanciales, sólo adoptivos, pero verdaderos hijos de Dios, practicando las bienaventuranzas, imitando a Nuestro Jesús, dejándoos grabar Su imagen en vuestra alma por Mí, conformándoos a Él… ¡Alabad a Dios por ello! ¡Porque os llamáis hijos de Dios, en verdad lo sois, y aún no sabéis hasta qué punto seréis transformados! (1Jn. 3, 2)
Para esto, purificados. Id por la vida con un método, dispuestos a conseguir una meta. No sólo no pecar, sino como Dios Padre os lo propuso: AMARLE, y lo mismo al próximo. Como el enfermo que a horas fijas toma su medicina, tened vuestras prácticas a esas horas sin pasaros ni una. Id curando los vicios y malas inclinaciones, no sólo en la confesión, sino con la estaca en el corazón de la que os hablé, el firme propósito, pidiéndonos humildemente ser sanados y haciendo obras buenas con prudencia, serenos, buscando la virtud contraria al vicio del que adolecéis.
Con prudencia. Como un conductor lleva su coche, tranquilo, sereno, atento a las señales, a los peatones, para no chocar ni dañar a nadie ni a sus vehículos. Se fija una dirección a seguir, un propósito firme de enmienda, y lleva su alma confiadamente a la meta, a eliminar el defecto.
Si sois prudentes llevando un vehículo, de más valor sin comparación alguna será vuestra propia alma. Lo que haya que hacer, se hace, se acomete con decisión. Y la meta no es conservar el cuerpo, sino el alma. Ya lo dijo Mi Jesús en el Evangelio: “Quien busque salvar su vida, la perderá; en cambio. El que pierda su vida por Mí y por el Evangelio, la guardará para la vida eterna”. (Mat. 8, 35) De este modo, Abraham, cuando obedeció la orden de salir de su tierra y su parentela hacia lo desconocido, fue prudentísimo; temía a Dios; igual cuando sacrificó a Isaac; lo mismo los profetas, que se enfrentaron al mundo, y Mi Esposa, cuando abandonó a José hasta el banquete de bodas, sin decirle lo que había… Era fiarse de Dios, esa es la verdadera prudencia.
Yo os bendigo junto con Mi Esposa, a los que tratáis de curar vicios para luchar por el Reino. Quedad en paz. Así sea.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario