Bienvenidos a compartir en el Espíritu de Dios

Hola a todos los que visitáis este blog. ¡Gracias por entrar! ¡DIOS OS BENDIGA!
En este momento empezamos a compartir nuestras vivencias y, también nuestras oraciones.
Rezo por vosotros. Rezad, también por mí. ¡GRACIAS!

¡Jesús es amor sin límites!



¡Dios te ama!¡Él esta vivo en tu corazón!

¡Que Dios os bendiga cada día de este año 2024


MªEsperanza Román


¡Alabado sea Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo!
Sólo Jesucristo es el camino, la verdad y la vida. ¡SÓLO JESÚS SALVA! Léelo en la Biblia.


¡Te basta mi gracia!

Reza ante el Santísimo por tu familia, amigos y enemigos...¡Él es el Todopoderoso!



¡Oh Señor, pongo en tus manos la sangre derramada por todos aquellos niños muertos en el vientre de sus madres a manos de los hombres, únela a la sangre de tu hijo Jesús que derramó por todos nosotros para la remisión de todos los pecados del mundo! Acoge, Señor esta oración. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén

sábado, 8 de agosto de 2020

Mensaje de Jesús a Marga





Mensaje urgente de hoy, Primer Viernes 07-08-2020

Jesús:
Mis Amados hijos de mi Iglesia de España y de todas las partes del mundo.
¡Yo os Amo! Os Amo Infinitamente.
¿No podéis ver dónde está vuestra Vida y vuestra Verdad? (1) ¿No me oís? ¿No sabéis qué pido Yo de mi pueblo en estos Tiempos tan duros?
¿Decís que no encontráis mi Voz?
He aquí que vengo y me manifiesto por esta pequeña escribiente. Ella escribe. Vosotros escuchad.
Si encontráis algo que no se ajusta a lo que pensáis, hablad Conmigo. Ella no interpreta este Mensaje. Sólo lo da de mi parte.
Resulta que, en contra del sentir popular, habéis decidido que, en tiempos de necesidad, de crisis y de enfermedad, debéis negar la Eucaristía y los Sacramentos a mis almas.
Contra toda lógica incluso humana y a nivel sólo material, decidís que se cierra la Fuente cuando las almas tienen más sed. (2)
Y opináis que vosotros, sin atender a las órdenes de Dios, sois dios que manda y dios que obliga a ciertas cosas que no son más que preceptos humanos: los vuestros.
Cargáis sobre mis fieles el estigma de la “desobediencia a la Iglesia”, (3) cuando vosotros, sin estar en Comunión con la Iglesia y con su Doctrina, no sois la Iglesia, la Iglesia Católica. (4)
Quizás queréis fundar una nueva. Pero no es la Católica.
Una nueva en la que la Eucaristía será el asunto menos importante a tratar. Lo que menos importa, pues hay más cosas y más importantes de las que ocuparse.
Los problemas os llueven y os lloverán más. A todos los niveles.
Porque estáis desobedeciendo a Dios y a su Doctrina y estáis intentando sobrevivir del ataque que sufrís, agradando a los hombres. Y resulta que agradar a los hombres es atacar a Dios. (5)
Pensad que la Iglesia se mueve alrededor de la Eucaristía. Y que sin Eucaristía no habrá Iglesia.
(6)
Yo he dicho que me quiero quedar entre vosotros. Estoy con vosotros. ¿No me defendéis? ¿No hacéis que toda vuestra vida gire en torno a la Presencia Eucarística en vuestras iglesias, en vuestros templos?
¿De qué creéis que tenéis que ocuparos, que es más importante?
Veréis cómo vuestras iglesias se despueblan de gente.
Veréis cómo así sí tendréis que cerrarlas, pero será porque dejarán de venir los fieles.
Creéis que tienen que venir a veros a vosotros. ¿Tanto podéis darles?
¡Si vosotros mismos carecéis del amor hacia vuestro pueblo, porque no lo tomáis de Mí, porque no sois personas eucarísticas!
No habéis dejado de reuniros. No habéis dejado de comer entre vosotros, porque lo veis importante y necesario.
Sí habéis dejado de repartirme entre mis fieles.
Éste es mi Mensaje para los Obispos y Sacerdotes que creen que pueden hacer una Iglesia a su medida, saltándose cada norma de la Iglesia Católica como les place y les conviene.
¡No estáis actuando bien!
¡Recapacitad!
¡Volved a vuestros orígenes!
No obliguéis a mis fieles a obedecer a vuestros caprichos y a vuestras teorías humanas. Ellos no están obligados a obedecer a unos Obispos, a unos Sacerdotes o Párrocos o Cardenales que no están en Comunión con la Iglesia Católica.
El Obispo, Párroco o Sacerdote solo, no es la Iglesia.
Dejad de procurar hacer una Iglesia a vuestra medida, y haced la Iglesia de Dios.
He dicho y es Palabra de Dios.
Y quiero que con esto vayas a ellos.
En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Hoy Primer Viernes de agosto, mi Corazón sufre, sufre de Dolor, porque los nuevos Judas traicionan a su Maestro y porque la Comunión sacrílega se extiende en mi Iglesia alentada por ellos.
En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

jueves, 6 de agosto de 2020

viernes, 31 de julio de 2020

Padre Pío


Pensamiento n° 211


Los mundanos, enfrascados en sus negocios, viven en la obscuridad y en el error, y no se preocupan de conocer las cosas de Dios, ni piensan en su salvación eterna, ni se cuidan de conocer la venida de aquel Mesías esperado y suspirado por las naciones, profetizado y anunciado por los profetas.

martes, 28 de julio de 2020

Mensaje del 25 de julio

“¡Queridos hijos! En este tiempo turbulento en que el demonio está cosechando almas para atraerlas hacia sí, los llamo a una oración perseverante para que en la oración descubran al Dios del amor y de la esperanza. Hijitos, tomen la cruz en sus manos. Que ella sea para ustedes estímulo de que el amor triunfa siempre, especialmente ahora que la cruz y la fe son rechazadas. Con sus vidas, sean ustedes reflejo y ejemplo de que la fe y la esperanza aún están vivas y que un mundo nuevo de paz es posible. Estoy con ustedes e intercedo por ustedes ante mi Hijo Jesús. ¡Gracias por haber respondido mi llamado!”

martes, 7 de julio de 2020


Posted: 06 Jul 2020 03:01 PM PDT
La tristeza es la aliada del enemigo, y santa Teresa de Jesús decía: “Un santo triste, es un triste santo”. La tendencia al desánimo es síntoma de no tener en orden nuestras prioridades. Cuando sucumbimos a la desmoralización, por no haber logrado nuestros propósitos, entonces es hora de preguntarnos cuál es nuestra jerarquía de valores. Y una de las prioridades fundamentales es nuestro amor a la Cruz. No es suficiente, para un cristiano, acomodarse a los fracasos con resignación. Olvidamos que el signo que nos hace vivir nuestra vocación de hijos de Dios es la Cruz. Quizás, a los ojos del mundo, se trató de un fracaso clamoroso. Aquel que «presumía» de hacer la voluntad del Padre, ahora, en ese instante dramático, se encontraba crucificado junto a dos desalmados… ¿Ese era el Padre que le cuidaba y escuchaba, al que incluso se atrevía llamar “Abba!”, “papá”?
Dejarse llevar por la tristeza es sucumbir, no al fracaso de la Cruz, que siempre es victoria, sino a la tentación diabólica que nos susurra: “¿Cómo puedes consentir semejante desagravio?”, “Tú estás hecho para cosas más grandes”, “No permitas que te humillen de esa manera”… Toda una serie de «razones» que, al final, nos dejan anclados en un supuesto pasado que siempre fue mejor. Lo que nos debe animar no son los éxitos en el mundo, porque de ellos nunca dependerá nuestra esperanza cristiana, que tiene su meta en la vida eterna. Lo que nos ha de alegrar, es que hemos sido elegidos para amar la cruz, esa que nos toca «soportar» día tras día, es decir, la que abrazamos con cariño y pasión de enamorados. En el silencio alegre de ese abrazo, escondido a los ojos del mundo, es como se produce la redención y la salvación de muchas almas… Nunca lo olvides.

Día litúrgico: Martes XIV del tiempo ordinario



escuchar




Ver 1ª Lectura y Salmo



Texto del Evangelio (Mt 9,32-38): En aquel tiempo, le presentaron un mudo endemoniado. Y expulsado el demonio, rompió a hablar el mudo. Y la gente, admirada, decía: «Jamás se vio cosa igual en Israel». Pero los fariseos decían: «Por el Príncipe de los demonios expulsa a los demonios».

Jesús recorría todas las ciudades y aldeas, enseñando en sus sinagogas, proclamando la Buena Nueva del Reino y sanando toda enfermedad y toda dolencia. Y al ver a la muchedumbre, sintió compasión de ella, porque estaban vejados y abatidos como ovejas que no tienen pastor. Entonces dice a sus discípulos: «La mies es mucha y los obreros pocos. Rogad, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies».

Stos del día




SANTOS ANTONINO FANTOSATI Y JOSÉ MARÍA GAMBARO. Son dos de los franciscanos martirizados por los boxers en China en julio de 1900, a los que la Familia franciscana recuerda el 8 de julio, encabezados por san Gregorio Grassi . Antonino nació en Santa María del Valle, cerca de Trevi (Italia) el año 1842. Ingresó en la Orden Franciscana y a los 23 años recibió la ordenación sacerdotal. En 1867 marchó a China. Fue misionero de grandes y geniales iniciativas. Ejerció diversos cargos y ministerios. En 1892 fue nombrado Vicario Apostólico del Hunan Meridional. Estaba de visita pastoral con el P. Gambaro lejos de su residencia, cuando intuyó la inminencia de la explosión revolucionaria. Regresó a su sede en Heng-tchen-fu, y el 7 de julio de 1900 llegaron a la ciudad los boxers, que los asediaron y arrojaron sobre los misioneros una granizada de piedras y de objetos contundentes. Los cadáveres de los dos misioneros fueron arrojados al río, luego recogidos y quemados y sus cenizas dispersadas a fin de que no se honrara su sepultura. José María nació en Galliate (Novara, Italia) el año 1869. Vistió el hábito franciscano en 1886 y, ordenado de sacerdote, lo enviaron a China, adonde llegó en 1896. Fue destinado al Hunan Meridional, del que era Vicario Apostólico Mons. Fantosati. Trabajó en el seminario indígena y en una cristiandad importante, pero en 1900 el obispo lo llamó para que lo acompañara en la visita al Vicariato. En este ministerio estaban cuando les llegaron las primeras noticias de la persecución contra los cristianos. Regresaron a la sede del Vicariato y allí ambos compartieron el mismo calvario.




San Fermín. En las diócesis españolas de Pamplona y de Tudela su fiesta se celebra el 7 de julio. Nació en Pamplona en el siglo III y fue obispo de Amiens (Francia), donde murió mártir el 25 de septiembre del año 303.