| by pajares95 |
15-10-01 DEL LIBRO DEJATE AMAR. DADO A FABIANA CORRARO.
F. Sería bueno que a medida que vamos incorporando a María a nuestras vidas tengamos un saludo, para que cuando lleguemos a nuestra casa nos dirijamos a Ella como corresponde y como se merece. Por ejemplo: “¡Hola, Mami!”, “¡Buenas noches, Mami!”, “¡Ave María Purísima, sin pecado concebida!”, o lo que nos salga del corazón. También es bueno tener una Imagen de María en un lugar bien visible e importante de la casa para que nos reciba cuando entramos a ella. El saludo a nuestra Madre también es “ORACIÓN”, porque nos relaciona con Ella, nos recuerda que somos Sus hijos, que estamos consagrados a Ella. El saludo también es una manifestación de cariño, de confianza, de fe, de amor. Si practicamos el acto de saludar a nuestra Madre cada vez que llegamos a nuestra casa desaparecen los sentimientos de miedo, de soledad, de orfandad frente a un mundo carente de Amor, huérfano. María quiere que la saludemos porque quiere imponerse en nuestras vidas a pesar nuestro. Quiere reinar en nuestros hogares, quiere que no haya más vacíos de Amor en nuestros corazones. Para esto debemos “dejarnos amar”, dejarnos conquistar.
M. Ya disfrutaste bastante estos días de las cosas de la tierra, ahora ven a disfrutar un poco de Cielo. No te apegues a las cosas de esta casa.
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